miércoles, 15 de enero de 2014

Galea 4 - 3 Juvenil B: Misterious

No sé qué nos pasa, debemos tener un virus extraño, algo que hace que cada vez que jugamos contra un equipo de Getxo, los árbitros misteriosamente se ven afectados por el síndrome del caos hacia el Ibarreko . Comportamiento erróneo, despiste globalizado o dicho de otra manera, ganas de jod…..fastidiar.

Comienza el partido con ambos equipos en busca de un triunfo, que para los contrarios seria igualarnos en la clasificación y para nosotros distanciarnos más de nuestros perseguidores y acercarnos al grupo de arriba.
El Galea empieza muy fuerte, con una primera ocasión que debido a un mal control de su delantero no genera lo que podía haber sido el primer gol. Poco después, en un córner botado en corto por el Galea, pone el balón en el área y rematan marcado su primer gol. (1-0)
Instantes después es el Ibarreko el que genera su primera ocasión al chutar Arkaitz desviado a portería rival, tras un pase de Cobos. El campo en pésimas condiciones causa que el balón constantemente bote mal y sea difícil de llevar. En el minuto 7, Yeison dentro del área, recibe una patada por parte de los defensores del Galea y el árbitro pita penalti. El encargado de lanzarlo es Andrés, logrando el empate (1-1).Un minuto después es el Galea el que tiene una nueva ocasión mandando el balón al palo. En el mintuto 11 nuevamente Arkaitz chuta a portería y el portero atento ataja el balón.

En el minuto 15 se realiza el primer cambio por parte del Ibarreko. Vidal se retira y entra Sotelo.
Urko, libre de marca y solo en el área grande, controla el balón y marca (1-2). En el minuto 27 el Galea, en claro fuera de juego, marca un gol que el árbitro considera válido y que los jugadores del Ibarreko protestan. Desgraciadamente el señor colegiado dice que es gol y Aimar es amonestado con tarjeta amarilla, por señalarle que el jugador estaba en claro fuera de juego.
Gran ocasión de Andrés, (m.33) , chuta pero el portero detiene el disparo.
Finaliza la primera parte con un cierto “resquemor” por el arbitraje que está teniendo el señor colegiado. (Errores de apreciación del señor árbitro, saques de banda que los da a un equipo y son del otro, faltas inexistentes, etc…).

Comienza el segundo tiempo y la primera ocasión es para Yeison, pero su disparo sale fuera. Y será el Galea (min .47) el que marque en una contra (3-2). En el minuto 55 Andrés vuelve a tener otra ocasión que nuevamente el portero del Galea desbarata. Pero al final la insistencia da sus frutos y Andrés por velocidad se va por banda y consigue marcar el gol del empate. (3-3).
En el minuto 67 Urko es cambiado por Egoitz.
Andrés nuevamente tiene una gran ocasión (min.75) pero esta vez y cuando todos pensábamos que el balón entraba en portería, el disparo sale desviado.
En el minuto 76m, Yeison, dolorido, se retira y entra Lander.
Y aquí llega el show del señor colegiado, o lo que sea. Fuera de juego de un jugador del Galea que está posicionado solo y en tienda de campaña, entre 8 a 10 metros, de nuestros defensores; recibe un pase de sus compañeros y ante la incredulidad de todos, marca gol. (4-3). Todos esperando que lo anulase pero, increíble y vergonzosamente, el árbitro sube el gol al marcador. (Seguimos buscando la cámara oculta de “inocente inocente”). Y por enésima vez el colegiado roba al Ibarreko lo que merecidamente se había ganado. Por lo menos el empate.
En los últimos minutos del partido, nos volcamos. En el minuto 82 Arkaitz tiene la oportunidad de igualar el resultado al rematar de cabeza un córner pero cuando el balón iba a portería con el portero batido, otro jugador de nuestro equipo, sin darse cuenta, intenta meter lo que ya entraba y lo que hace es evitar el gol.
El partido finaliza pidiendo explicaciones al árbitro por parte de los nuestros, pero éste lo único que hace es sacar una roja a Sotelo por un comentario que hace sobre lo sucedido hacía escasos minutos.

Señalar también que tanto nuestro entrenador como nuestro segundo entrenador fueron amonestados con sendas tarjetas rojas. Está bien que en los partidos se meta algo de presión a nuestros jugadores (a veces incluso les puede venir bien), pero también hay que saber controlar esa tensión porque puede pasar que se vuelva en contra del equipo